Buscando apoyo para poder defender los derechos y libertades de los usuarios de salud mental en España

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Buscando apoyo para poder defender los derechos y libertades de los usuarios de salud mental en España por un posible vacío legal que podría crear jurisprudencia.

En política y psicología, divide y vencerás o dividir para reinar (del griego: διαίρει καὶ βασίλευε, diaírei kaì basíleue) es ganar y mantener el poder mediante la ruptura de las concentraciones más grandes, en fracciones que tienen menos energía en su aislada individualidad. El concepto se refiere a una estrategia que rompe las estructuras de poder existentes y evita la vinculación de los grupos de poder más pequeños. Podría ser utilizada en todos los ámbitos en los que, para obtener un mejor resultado, es en primer lugar necesario o ventajoso romper o dividir lo que se opone a la solución o a un determinado problema inicial.

Esta pretensión de dividir a las mayorías de este mundo fue lo que el Apóstol san Pablo llegó a conseguir cuando en cierta ocasión se vio asediado en medio de un gran apuro de persecución de parte de los fariseos y saduceos. Cuando en aquel momento san Pablo quiso defenderse ante el Sanedrín en medio de un juicio, la sala quedó dividida después de declararse fariseo y también porque se le estaba juzgando por su esperanza en la resurrección de los muertos (Hch. 23, 6-10). Esto fue lo que precisamente llegó a provocar en aquel momento una división y alboroto entre aquellos que se encontraban aparentemente unidos.

Ahora me surge por mi parte la necesidad de imitar la técnica que practicó san Pablo en aquella ocasión en lo que me compete concretamente en la defensa de los derechos y libertades de todos los usuarios de salud mental en España. Con esto quiero decir que he encontrado una posible grieta legal que si Dios me da salud y tiempo podría crear esta misma división y alboroto en esta sociedad opresora. Es por esta razón que para ir atando cabos, me encuentro buscando ahora cualquier tipo de ayuda para poder asesorarme mejor de los pasos que debería de dar.

La primera carta que he escrito la he dirigido al Dr. Jesús San Román, que es también experto en bioética y director de un programa en Radio María que trata de aspectos relacionados con la vida. Como me parece también un programa muy comprometido con la dignidad de las personas he considerado muy acertada la iniciativa que he llegado a tener con este equipo. A continuación, comparto esta carta con aquellas personas que les pueda interesar conocer las primeras pinceladas de esta posible grieta legal que de llegar a impugnarla más adelante en los tribunales podría crear jurisprudencia.   

De: Jesús del Pino Marín <buenanueva@hotmail.es>
Enviado: jueves, 17 de julio de 2025 12:56
Para: entornoalavida@radiomaria.es <entornoalavida@radiomaria.es>
Asunto: Una falla legal que podría crear división y alboroto en el mundo tal como llegó hacer san Pablo con su predicación… (Hch. 23, 6-10)

Estimado Dr. Jesús San Román y resto del equipo de Entorno a la Vida.

Antes de presentarme a Ud. me gustaría darle mi enhorabuena por vuestro programa en Radio María, pues cuando tengo la ocasión de escucharlo me edifica mucho y me ayuda a crecer especialmente en la cultura de la vida.

Soy una persona que lleva cargando con la cruz de un diagnóstico que me hicieron en salud mental hace más de veinte años. Durante este periodo, he adquirido gracias a Dios valiosos aprendizajes que, a través de los principales acontecimientos de mi vida, me han llevado a asumir el compromiso de defender con verdadera justicia los derechos y libertades de los usuarios en esta área vinculada a la Seguridad Social.  Es importante que tome consciencia ante todo sobre la gran corrupción que existe en el campo de la psiquiatría, aunque si me permite hacer uso de otra palabra que es sinónimo del deber cristiano, la mayor misión a la que me siento llamado es la de crear a medio largo plazo un cambio de mentalidad para disipar las tinieblas de la ignorancia y la sociedad comience a abrir los ojos para que comprenda que nunca han existido las “enfermedades mentales”, sino en todo caso los «desórdenes mentales». Es en este término preciso y correcto donde podemos hablar de gracia o de pecado.

Si me dirijo a Ud. o a cualquier persona que ejerza la medicina y/o pueda ser experta en bioética se debe a que tengo la necesidad de compartir con todas las personas que tengan cierta sensibilidad para ayudarme a pulir dos reclamaciones que tengo ya agendadas y que dependen si Dios quiere del tiempo que puedan dilatarse en responderme para poder actuar en consecuencia. Conozco a un buen abogado penalista en Sevilla que es católico practicante y que también ha sido magistrado el cual me comentó en una ocasión que conoce bastante bien el paradigma de la psiquiatría porque ha tenido que hacer al respecto muchas intervenciones. 

Tengo proyectado para más adelante poner en manos de este abogado estas reclamaciones principalmente para este cometido que ya les acabo de comentar. Me gustaría contar con vuestra opinión, pues creo que he encontrado una falla que podría resultar un vacío legal que posiblemente podría crear a su vez jurisprudencia para liberarnos al menos en gran parte de las cadenas de los diagnósticos, las puertas cerradas, las ataduras en las camas y las cadenas químicas con las que nos vemos sometidos. Esta falla que con mayor precisión en el lenguaje se trata de una manipulación por parte del poder legislativo la he podido hallar en la Ley Orgánica 2/2010, de 3 de marzo, de salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo y la Ley 41/2002, de 14 de noviembre que hace referencia a la autonomía del paciente y de derechos y obligaciones en materia de información y documentación clínica. En realidad, lo que he podido observar en esta supuesta manipulación por parte del poder legislativo se trata concretamente de una contradicción entre estas dos leyes que podrían favorecer también a los usuarios de salud mental en España, para enfatizar nuestro derecho a negarnos a los tratamientos que a muchos usuarios nos imponen con el ejercicio coercitivo de los psiquiatras y resto de personas que trabajan en colaboración con estos.   

En principio solo está en mis manos dar visibilidad a estas reclamaciones en mi espacio de evangelización en línea, en el que tengo la oportunidad de ayudar a algunas personas que se acercan y que tienen interés en ampliar sus miras en el conocimiento de lo que respecta a la locura por la causa de Cristo (www.novaevangelizatio.org) Más adelante, si Uds. consideran que esta causa es noble y puede resultar un verdadero beneficio a la sociedad me gustaría rogarles para que de la manera más oportuna les parezca puedan apoyarme. Tal como sabemos muchos cristianos como este servidor que les escribe, en verdad somos pocos, pero el Señor nos quiere unidos para poder luchar.

No quisiera agobiarles, pero si tienen un ratito, al menos escuchen a esta psiquiatra en ejercicio la cual expresa con gran valentía la verdad sin glosa sobre su campo de conocimiento. Es una persona lúcida e inteligente y muy valiente, aunque si escuchasen también el recomendable turno de preguntas, podrán apreciar algún pequeño detalle que no podemos defender nosotros los cristianos, pero al igual que todo lo que tengo colgado yo en mi página Web, los animo a que sigan el consejo de san Pablo cuando nos dice que lo examinemos todo y que nos quedemos con lo bueno. Por medio de este consejo de san Pablo podremos salvar nuestras discrepancias para poder llegar definitivamente a la plena manifestación de los hijos de Dios.

Espero contar con vuestro completo apoyo.

 MUCHAS GRACIAS

Atte.: Jesús del Pino Marín

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